
Lactancia materna – foto de Victòria Peñafiel
Cómo bi madre he vivido dos lactancias muy diferentes. Precisamente porque a veces la lactancia no es nada fácil
La primera fue un poco traumática, dura y complicada. Lloré muchísimo y me sentí derrotada en más de una ocasión. Pero mi cabezonería y un buen asesoramiento me ayudo a conseguir una lactancia mixta. Que en cuanto la acepte me hizo muy feliz. La segunda a pesar de algún problemilla al principio la calificó cómo maravillosa. La verdad, es que yo no sabia que podía ser así.
Hoy me he decidido a escribir este post, porque estoy un poco cansada, de leer artículos sobre la guerra entre la lactancia materna y artificial. No entiendo esta necesidad de enfrentar a las madres. Con lo bonito que es compartir experiencias y ayudarse unas a otras. Así que, aprovecho que estamos en la semana mundial de la lactancia materna para lanzarlo.
Por supuesto, que cómo en todos los ámbitos de la vida hay posiciones enfrentadas y radicales. Pero cómo todo en la vida, no todo es blanco y negro. Existen muchos matices. Al menos para mi.
Desde mi experiencia tengo que decir, que a veces, por mucho que quieras no puedes.
Y que pienso que lo más importante es que, tanto tu cómo el bebé estéis bien. Y si estar bien implica darle biberón pues adelante. No vamos a entrar en que el pecho es lo mejor, porque esto ya lo sabemos.
No deberías justificar tus decisiones, aquellas que tomas libremente y con toda la información en tus manos. Sólo disfrutar de la lactancia, sea cómo sea, escojas lo que escojas. Sin presión y aislándote de los comentarios externos, porque hagas lo que hagas los vas a recibir.
No creas que vas a recibir menos por escoger una o otra. A veces la cuestión es opinar hagas lo que hagas.
¡Perdonar por el rodeo, vuelvo al tema! Hoy os cuento mis dos experiencias.
Mi primera lactancia – MITXA

Lactancia, bebé tomando biberón . imagen CC0 de Pixabay
No empezó con buen pie, para que negarlo. Después de la cesárea las dos estábamos un poco atontadas, tardo bastante en mamar y no se llego a enganchar bien. Durante el día las cosas no mejoraron y por las noches fue a peor… No se despertaba, no comía apenas y en 5 días de ingreso no note subida en ningún momento. Que paso, que la niña se empezó a poner amarilla y cada vez iba a más, me decían ponla al sol, ¿que sol si estábamos a finales de diciembre?, La niña perdió muchísimo peso, entre eso y la ictericia, acabo ingresada en la UCI, unos días y a mi me dieron el alta y me mandaron a casa (sentí que me arrebataban a mi niña, sí sé que fue por su bien, pero no veas que mal rato).
Vamos, que interferencias hubo bastantes y la cosa fue complicada. Pero, gracias a nuestra super comadrona de Post parto, finalmente conseguí mantener una lactancia mixta feliz, aunque cómo ya he dicho y no lo negaré nunca, lloré mucho y estuve a punto de tirar la toalla, en más de una ocasión. Pero el hecho que la cardióloga la recomendará para ella, hizo que superara todos los impedimentos y siguiese adelante. Con mixta que era lo que ella realmente necesitaba.
Esta primera lactancia duro 37 meses, si queréis podéis leer el post de despedida que escribí, en el que os hablo sobre el destete, hace ya 3 años y medio, fue todo lo respetuoso que pude aunque hubieron lagrimas, ya que ella no quería que acabará.
Mi segunda lactancia – EXCLUSIVA
Y ahora que estoy de lleno metida en mi segunda lactancia
. Pienso, que las circunstancias, la información, la experiencia anterior y el apoyo han sido claves. También te digo que tenia muy claro, que si la niña empezaba a perder peso, como la hermana, haría mixta. No pensaba arriesgarme a otro ingreso. Cómo lees, la segunda no tiene nada que ver con la primera.
Esta empezó con muy buen pie, me ayudaron nada más salir del quirófano (también fue cesárea pero esta fue muy diferente), la comadrona, me enseño cómo conseguir un buen agarre y todo el equipo del hospital (el mismo, en el que parí 4 años y medio antes), estaba bastante preparado e informado. Para ayudar a las mamás, que cómo yo optaban por lactancia materna.
He tenido algún problema, no lo negaré. He pasado un par de mastitis, cosa que no me paso con la primera. Pero gracias a los profesionales, tanto el personal del hospital cómo la súper comadrona de post parto y a APP’s como LactaAPP, esto no ha sido un gran problema. Esta vez no sé lo que durará, no me lo planteo. Supongo que hasta que una de las dos o las dos digamos basta.
Si necesitas ayuda acude a una especialista en lactancia, también encontrar ayuda online cómo el curso de Lactancia materna de Alba Padró te dejo la reseña o su libro «Somos la leche», también puede ser un buen apoyo. Y en Facebook hay paginas de apoyo sobre lactancia materna y también de artificial. Hagas lo que hagas hazlo consciente y feliz.