¡Ay, la autoestima! Ese concepto que tenemos sobre nosotros mismos, que ha veces no es tan bueno cómo debería
En resumen, lo que pienso, lo que siento y lo que hago respecto a mí.

Un año más tarde vuelvo al blog con este tema. Prometí contar cómo van las cosas con la peque, después de enfrentarse y empezar a trabajar con este problema que nos surgió en casa el año pasado.
Los cambios han sido muy positivos y el trabajo se nota y mucho. Creo que gracias al apoyo y el esfuerzo ha desaparecido el problema. Puedo decir que estamos teniendo muy buenos resultados y se notan. Ahora mismo la peque se valora y confía en ella misma. Algo que nunca debería haber cambiado.
Desde que detectamos el problema hemos hecho y probado muchas cosas. Las más importantes la comunicación, el refuerzo, el apoyo y la aceptación.

Lo último que hemos hecho que nos ha resultado muy positivo es participar en el último taller vivencial Crecer sin prisas de Tiempo de infancia sobre “Disciplina Positiva y Autoestima: Ayúdales a conocerse y amarse hoy y siempre” autoestima impartido por Angie Joya de Impliquo.
El taller lo hicimos los dos ya que para nos hemos volcado e implicado muchísimo los dos para ayudarla. Y con este último taller, pienso que hemos salido reforzados, con nuevas ideas y muchas ganas de seguir apoyando a nuestra peque. Y con el deseo que nunca se repita. Y si lo hace contar con las herramientas necesarias para ayudarla a gestionarlo.

Pues bien, en el taller Angie nos habla de la base de la autoestima: Que describió usando el termino AGUA, en el que cada inicial equivalía a unos términos. Así resulta más fácil de recordar.
Es más no sólo nos sirve para niños. La podemos aplicar para todos.
A de amor incondicional:
La necesidad de sentirse amados y aceptados tal y cómo son. Como Tips propuso:
- Cambiar el SER por el ESTAR. No es lo mismo decir “Eres tonto” que “Estás tonto”.
- Demostrar ese amor y confianza hacia ellos.
G de gestión de errores:
Ver los errores como oportunidades de aprendizaje. Y recomendó analizar cómo nos comportamos nosotros frente a los nuestros. Ya que, muchas veces nuestros hijos actúan igual.
Tips:
- Empatizar con sus sentimientos
- No castigar, ni criticar. Ayudarle a reflexionar o escucharle.
- Mostrar que los adultos también nos equivocamos.
- Dar la oportunidad de volverlo a intentar.
U de utilidad y reconocimiento:
Reconocer su esfuerzo, su ayuda, sin caer en el elogio. Que se sientan útiles dejándoles hacer las cosas por si mimos. Motivarles a que lo intenten y alentarlos.
A de aceptación de pensamientos:
Cuando expresa un sentimiento o emoción lo correcto seria validarla. Ser conscientes de esos pensamientos y sentimientos y aceptarlos ayuda a tener el control y actuar.
Tips:
- Explicar una historia, leer un libro o usar metáforas para ayudarles a aceptarlos.
- Ayudar a los niños cuando están bloqueados a transformar ese pensamiento o sentimiento negativo en positivo. Cambiar un “no puedo” por “si sigues entrenando lo conseguirás”.
- Visualizar una situación que nos genera sentimientos negativos, puede ser útil para afrontarla. O recrearlas a través del juego les puede resultar muy útil.
Hicimos varias dinámicas que nos parecieron muy interesantes:

En grupo: Contestamos a la pregunta ¿Cómo sabe nuestro hijo que le queremos? ¿Cómo demostramos ese amor incondicional? Y salieron ideas y pensamientos muy interesantes. Esta es una pregunta que nos puede resultar muy útil contestárnosla. Te puede ayudar a darte cuenta de lo que haces y como lo haces. Incluso se la he hecho a la peque. Y me contesto cosas que me han gustado mucho. Es que mola mucho verse a través de sus ojos.
Con esta dinámica quería mostrarnos, los lenguajes del amor. Y hacernos reflexionar, sobre cómo un niño se siente querida, a través de que actos y que acciones.
Individual: Escribir una frase para alentarte y motivarte cuando te has equivocado con ellos. ¿Y tu, qué te dirías?
Aquí te cuento lo que yo escribí: – Confía en ti misma y recuerda que un error es una oportunidad de aprendizaje. ¡Sigue adelante!
Estas frases las colgamos en unas ramas que poco a poco se fueron llenando y finalmente se iluminó. Me pareció una dinámica muy bonita y enriquecedora.

Finalizó el taller Yessica, de tiempo de infancia, explicando el cuento Orejas de mariposa, usando un pequeño teatrillo de sombras chinas. Un regalo maravilloso y un gran libro con el que podemos trabajar la autoestima.
Nos gusto y nos motivo muchísimo, tanto que volveremos. El próximo “Conecta con la Naturaleza en familia”, es el próximo 27 de abril.
Creo que hemos iniciado un gran camino juntos y de la mano. Es muy importante estar a la par con la pareja. Y poco a poco, vamos descubriendo sus frutos, en forma de tranquilidad, amor y un ambiente mucho más agradable. Aún nos queda mucho camino por recorrer.